La Luna de Tartessos

El viento que nos lleva no es más que un silbido sordo cuando el aliento te falta. No son las palabras las que mienten cuando no hay aire que las traiga, ni son tus manos en mi espalda ni tus ojos cerrados ni mis ganas, ni tus ganas. No son mis actitudes de hace años ni mis aptitudes para entender qué hace falta, no lograré entender la ausencia que no quiere ser explicada. El viento que nos lleva no es más que un silbido sordo cuando el aliento te falta. El viento que nos llevará, no me importa una mierda sin ti ni tus palabras.

Hoy me he despertado entre más de ochenta gritos con los rezos absurdos a unos dioses sordos. Hoy me he despertado pensando que je rêvais et je dis desde cuando un sueño me fait saigner Le Vent Nous Portera et nous allons apporter leurs âmes... Pensamiento: Espero que desaparezcáis en el fuego de vuestra religión quizás en ese momento veáis que no existe ni Mahoma, ni Yavhé, ni ningún otro Dios.

Y si estuve loco si fui bohemio o soñador si nunca supe cual era mi rumbo si en algún momento acabé roto ciego y solo. Nadie se asomo al vacío ni arrojó una soga nadie luchó por mi nadie cometió errores salvo yo. Nunca me pidieron que me quedara a su lado. Y si estuve cuerdo si estuve centrado o acertado si siempre pensé una línea recta y nunca cerré el círculo perfecto miré al futuro con esperanza. Con los pies en el suelo me arrastró a la felicidad y lucho a mi lado los errores los fuimos salvando. Nunca hizo falta que me pidiera estar a su lado. Y aún así me dejé algo olvidado en sus cajones y vuelo cada noche para asomarme a ese maldito muro que de vez en cuando me atormenta. Y pienso: "Nunca volviste, pues nunca te fuiste." Este pobre soñador, bohemio y loco cada año, te mandará un beso el mismo día Este idiota, cobarde y canalla cada sueño o tormenta, rezaré al cielo en la noche, por ti.