La Luna de Tartessos

Hieren las letras más que las guadañas, pero más hieren las ausencias y no saber qué será de ellas. Se queman las páginas de esta historia que vuelve a quedar en blanco y no dejaré por ello de manchar el tiempo de silbar melodías de interminable fantasía. Moriré sin saber cuantas palabras serán desperdiciadas, si los recuerdos dejarán de existir o si alguna vez pensarás en ellas. No se si recordaré quererte sea abril o diciembre, decidí vivir en junio a las puertas del verano. No me arrepiento tan solo te extraño. Si hieren las letras más duele la ausencia.