¿Porqué tengo la sensación de no ser escuchado? ¿De no ser creído? ¿De no ser amado? Y esto último está más que claro. Y nunca me importó lo que piensan Y ahora veo a los que oyen Y saludo a los que huyen Y sonrío a los que muerden. Pero no entiendo a los que aman A quienes no esperamos nada A los que no ofrecemos nada Aún siendo sinceros Desnudando el alma. Y ahora lucho por mi Por no perderme en mis caminos Por sendas amuralladas que no dejan ver más allá Hacer lo que me place pero elegir Uno con vistas al mar Porqué si el equilibrio se tuerce No se que podría pasar. Y ahora seguid sin escucharme Seguid sin creerme Y no me améis, Pues no lo quiero. Dejadme solo Con mis pocos aciertos Y mis muchos errores Que no correspondo Que solo busco el botón Para abrochar un alma apenada.