Un beso de olitas saladas
Un beso de olitas saladas un abrazo tierno y sincero y palabras para el consuelo. Una explosión de piriñaca un montón de papelillos por febrero y muchas ganas de volver al cielo. Airecito de levante y de poniente levantando las faldas de vuelo y las ganas a los jovenzuelos. Las cuerdas vibrando las gargantas en celo y el alma echando el resto. Alegrías y llantos aderezado de sal y agüita clara la mismísima eternidad Cádiz no tiene fronteras Cádiz va con su gente Cádiz se siente Cádiz siempre.