Sin motivo aparente

Sin motivo aparente
sin más
sin lágrimas ni anhelos
sin ganas de soñar.

Aparece, como una imagen nítida
para confundir
para pesar
y hacer que quemen las cadenas
esas que lucen en mi seno
esas que diseñé con esmero.

Qué habría sido con valentía
con egoísta bravura,
bohemio y soñador
con la bendita locura.
Y no te confundas,
que no me arrepiento
no tengo quejas
ni lamentos
ni esto es una amarga carta de desaliento.

Es la forma de decir
que te quiero
que tú, solo tú,
mi soledad, te mantuviste fiel a mi lado.
Que unos me echaron de su vida
y otros nunca me tuvieron,
unos siguen ahí sin conocimiento
Y quién llenó con su esencia estos versos
no quiso volver, a leerlos.

Mi Soledad, amiga y amante,
infiel compañera
te engañé tantas veces con cualquiera.
Sigo aquí, siempre aquí,
sin diferenciar entre mis deseos y mis anhelos
entre la necesidad, la obligación y la carencia,
sigo queriendo morir de éxito
Y vivir, por y para la Belleza, vivir.


Comentarios

Entradas populares de este blog

No me dejes pensar.

13 Lunas

Dos dimensiones: espacio